viernes, 23 de noviembre de 2007

Un poquito de coherencia, por favor

Saben que si hay algo que afecta a éste corresponsal es Eurovisión.
Cierto es que yo soy un tipo raro y considero que buenos eran los tiempos de antaño, donde todo el mundo estaba obligado a cantar en su idioma y con orquesta en directo, y se llegaban a ver grandes momentos, como el director de orquesta de los Dschinghis Khan sudando más que todo el grupo junto, o unos pobres patanes intentando hacer un remedo de los Backstreet Boys en húngaro. Momentos épicos.
Y ahora Austria anuncia que no va a participar más en Eurovisión, porque, según ellos, ha perdido su "valor artístico" para convertirse en un "acto político". "Valor artístico". Habló la cadena de televisión que mandó a un glorioso jombre (Alf Poier, desde siempre en nuestra lista de héroes) a cantar (quicir) "La vaquita hace mú" en estirio.
Lo que emisoras como la ORF resienten es que vayan siendo relegadas año tras año a la fase de clasificación, mientras que países como Serbia, Estonia o Ucrania ganen el festival. Opinan que el hecho de que los países del Este se voten a sí mismos les da una ventaja injusta. Y no sólo se votan a sí mismos: gracias al televoto SMS, España le ha dado los doce puntos a Rumanía durante los últimos tres años de forma invariable. En suma, que los países del Este ganan porque son más.
Mentira y gorda. Los países del Este ganan porque son mejores, y si son mejores es porque a los países del Este Eurovisión les importa de verdad. Solemos olvidar que hace menos de veinte años veían Eurovisión con ojos golosos mientras sus propias televisiones públicas emitían fascinantes reportajes sobre factorías colectivizadas de yogur. Para los estonios, serbios o ucranianos, participar en Eurovisión es un símbolo de que pertenecen a la Europa capitalista, y ganar es ún símbolo de que son tan buenos o más que los países de Europa occidental que muchas veces les desprecian.
Nosotros pasamos de Eurovisión, lo consideramos una horterada y mandamos a las Ketchup. ¿Y luego vamos y nos quejamos? Un poquito de coherencia, por favor.
Seguiremos informando.

3 comentarios:

la reina del hielo dijo...

Estoy totalmente de acuerdo contigo, Thiago (aunque te perdieras el glorioso Eurodance de este año, el año que viene hay que quedar para verlo). Eurovisión es genial y si es una mierda es porque nosotros mandamos mierda, que con un poquito de ganas los Finlandeses mira lo que hicieron.

Lunatrix dijo...

... pues si, Eurovision ya no es lo que era. Que tiempos aquellos con el Lalala!!! : )

Anónimo dijo...

El Eurovisión del año pasado ha sido absolutamente memorable precisamente por los increíbles y horteras grupos que han ido. Es una cosa hortera: Como tal hay que tomársela, y si un año gana una manada de orcos y al siguiente la prima de Harry Potter bienvenido sea.

La actitud de Austria de hace unos años mandando al pajarraco aquel me pareció acertadísima y encomiable, y esta nueva decisión, por el contrario, una brutal catetada. ¿Será un síntoma de que los tiempos están volviendo a cambiar... para peor?

Por otro lado, de la actitud "eurovisiva" española mejor ni hablo. Si fuera un concurso de música seria europea, con sus aportaciones folklóricas, deberíamos seguramente mandar algún músico flamenco... Pero como es canción hortera mandamos simplemente lolailadas. ¿Se enterarán un día de que las cosas lolailas no nos interesan ni a nosotros? Solo nos falta enviar al Bisbal... ¡¡Aprovechemos el giro a la comedia musical que ha tomado el concurso, que ahí tenemos bastante que aportar!!

¡¡Decidido: Cañita Brava a Eurovisión!!