domingo, 2 de marzo de 2008

El síndrome del malo de película

Todo el mundo lo conoce, así que pasaré a mostrar un ejemplo práctico.


ROBIN: - ¡Santas cavernas, Batman! ¡La Mujer Gato nos ha atrapado!
BATMAN: - ¿Qué harás, Mujer Gato? ¿Nos vas a pegar un tiro en la cabeza a cada uno y dejarlo todo resuelto?
MUJER GATO: - No soy tan torpe, Batman. Antes os revelaré todo mi plan maligno para la dominación de Ciudad Gótica (sic) y luego os dejaré a merced de mi Artefacto Para Una Muerte Horrible®, pero desafortunadamente no podré ver como morís, porque yo y todos mis secuaces tenemos que ir a cualquier otra parte.
BATMAN: - Vaya por Dios.

De hecho, en la imprescindible lista Cosas que Haré cuándo sea un Señor del Mal, uno de los puntos primordiales es: "Nunca explicaré mi plan a mis enemigos".

Sin embargo, todo éste inmenso precedente le ha pasado inadvertido al bueno de Gabriel Elorriaga, que ha ido al Financial Times a contar cómo va a derrotar al PSOE en éstas elecciones.

Que la campaña bigotista iba a por la desmovilización del voto ajeno y la movilización del propio era algo que sabíamos usted, yo, y toda la Tribuna Sur del Bernabéu. Pero, hombres de Dios, eso no se hace. Y si se hace, no se cuenta en público.

Debían haber aprendido la lección del 2004: el pueblo español es suficientemente inteligente como para captar cuándo le están tomando el pelo. De ahí el 14-M, de ahí Nunca Mais, y de ahí que se estén vendiendo poquísimas entradas para el Rock in Rio (hijos, ya que no lo vais a hacer en Rio, al menos ponedle un poco de rock. ¿Alejandro Sanz?)

En fin. Rajoy estará diciendo: guárdeme Dios de mis amigos, que de mis enemigos ya me guardo yo.

Seguiremos informando.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ja, ja, ja, ja...
Digo... Bwuhuhuhuahuahahahahaha...