miércoles, 11 de marzo de 2009

La navaja de Hanlon

Uno de mis adagios favoritos (de los literalmente cientos de ellos) es la llamada navaja de Hanlon, que dice, simplemente,
"no atribuyas a la malicia lo que pueda atribuirse a la estupidez."
Es una filosofía muy sabia que evita muchos dolores de cabeza y permite mantener un cierto optimismo hacia el ser humano en general.

Pero, por supuesto, El Mundo no se ha convertido en el segundo periódico del país por aplicar la navaja de Hanlon (más bien todo lo contrario), y, en consecuencia, Esperanza Aguirre tampoco es muy favorable a su uso.

Así pues, si los informes de los espías del Mossad gentil de doña Espe dan información falsa o errónea, no es por que los agentes del consejero Granados sean unos cuñaos (que ya hay que serlo para dejarse pillar), sino porque el espionaje, en realidad, no existe: es una conspiración de Gallardón, el PSOE y los Iluminati en contra del bien de los madrileños.

Y si lo ha dicho El Mundo, es verdad. Hale, márchense a sus casas, aquí no hay nada que ver.

En realidad, naturalmente, el carpetazo viene dado porque los espiados en cuestión, bigotistas como Espe, han dicho claramente que no se van a callar por el bien del PP, mucho menos por el bien del PP de Madrid, que tantas patadas en las espinillas les ha dado.

Obviamente, usted, yo y la grada sur del estadio saben que ésto es cerrar en falso. Corresponde el PP cortar el fleco para que no se le quede colgando hasta las europeas. A ver si tienen el valor.

Seguiremos informando.

1 comentario:

pensamientoartificial dijo...

Contra la estupidez los propios dioses luchan en vano...